Anoche después de mucho revolver, finalmente aparecieron algunos pares de medias coincidentes. Y también anoche, se pusieron las dos a armar las carpetas del año pasado, con las mismas carátulas, los mismos ganchos y hojas nuevas. Así de resignadas están. Por un lado me da un poco de culpa porque sé cuanto no se privan de ostentar algunas criaturas en el cole todas las maravillosas cosas nuevas se compraron. Por el otro, sé que no voy a poder estar de acuerdo jamás con el despilfarro y la compra injustificada. Y a esta altura de mi vida como madre de hijos escolarizados, y son varios años, ya me di cuenta de que la mayoría de las compras escolares son completamente innecesarias.
Ya sé que la semana que viene van a empezar las listitas con los libros de este año, y los mapas para geografía, y otras cosas más de las cuales no se puede zafar. Pero me ocuparé llegado el momento.
En un punto lo que me pasa es que no logró conciliar mi ritmo interno con el ritmo del Ministerio de Educación. Bueno, con el ministerio hay muchas cosas más que no logro conciliar, pero en fin...Me parece demasiado ayer que era diciembre y estábamos revoleando los zapatos y empezando a vivir en ojotas. Ese cansancio que me generó el fin de año, las visitas, el calor, empezar enero agotada, tejer sin parar para el showroom pero después llega febrero y las zarzamoras....no sé donde quedó todo eso. Sin darme cuenta desapareció y ahora no es más que otro verano para ser recordado en fotos y anécdotas.
Y entonces me acuerdo de mi infancia, cuando miraba a ese futuro que me mostraban los grandes, lleno de horarios, importancias de traje y corbata, algo horrible que se llamaba findemés, compras obligadas, vacaciones estipuladas milimétricamente, y demases, y ya me decía yo, eso no puede ser la vida. Y sin embargo resulta que ahora, con un escenario un poco distinto, estoy haciendo casi lo mismo. De alguna manera caí en la misma trampa. La sensación predominante es que el colegio de mis hijas rige toda nuestra vida. Y no podemos salirnos del girar de esa rueda. Por ahora...