Derribando mitos?

Hace unos días Clari se sorprendió al descubrir que las pirámides de Egipto son de verdad. Claro. Ella las ha visto en películas de aventuras con momias vivientes y tesoros escondidos. Su mente sumó dos más dos y le dio que eran de mentira. ¿Y se puede subir? me preguntaba!
Me dejó pensando, la verdad. En mil cosas. En cuando descubren que Papá Noel y los Reyes  y meses más tarde caen con que el Ratón también y entonces había que aclarar que los ángeles si existen (porque yo creo que existen porque tuve ciertas experiencias que no vienen al caso). En la llegada del hombre a la luna, será cierta? será mentira? Nunca lo sabremos. Las pirámides al fin y al cabo yo no las vi nunca; aunque conozco gente que si. Hay vida más allá de la tierra?  Existimos nosotros? O somos una proyección de alguna mente, tipo Matrix? La verdad que les dejamos cada matete en la cabeza a estos pobres chicos...
En fin. Todas estas cosas y muchas más se nos da por pensar con Clarita mientras tejo agarraderas y guirnaldas bajo el damasco y mientras estudiamos matemáticas para su última prueba del año y mientras ella arma pulseras de macramé con mostacillas.

Y para ver una de las cosas que pasan cuando me siento a tejer bajo el damasco click acá.

Con los ojos

Él estuvo varios meses sin trabajar y los dedicó a agrandar la huerta al doble de lo que era. Además la tuvo que cubrir y cercar porque entre las langostas, los pájaros y los cuises nos puede llegar a quedar nada en media hora. A partir de septiembre empezamos con los almácigos y preparamos canteros y tierra. Es una tarea de nunca acabar. Los yuyos crecen por minuto. El sol está fuertísimo y la lluvia no viene. Entregué mi casa al desorden para dedicarme a mis futuras ensaladas y a los tejidos que tengo que tener listos en diciembre. Asi que por acá, pocas palabras y un muy pequeño recorrido visual por lo que anda pasando en mi casa.

El frente de la casa y las dos huertas al costado

Bajo el damasco tejo...

Dentro de la huerta nueva

Frambuesas, lechugas y parra

La puerta de su infancia reciclada. 

Anita aprende a diferenciar yuyos de lechugas, rúculas y remolachas.

Paseo romántico?

El sábado me fui con él al basural del pueblo a llevar unas cajas de cartón. Eran muchas, y las podríamos haber sacado para que las retirara el camión, pero tengo unos vecinos que juntan todo y lo queman, tenga plástico o no, y a él eso lo saca, así que optamos por llevarlas nosotros. De paso les cuento que, aunque es bastante asqueroso y las moscas te rodean sin parar, a mi me encanta ir porque siempre me vuelvo con algún cachivache. Y si me están mirando raro, les aviso que estoy lejos de ser la única loca que lo hace! Guantes, alcohol en gel y muchas ganas mediante, me traje estos tesoros!!

 Esto es un quemador de gas. Se lo trajo el. No sé, no sé....

Justo me estaba haciendo falta un tupper.....Na, mentira! Lo lavo y pongo una plantita!!

Y la que, cuando le mostré la foto a Clarita me dijo ¿por que no la trajiste? 

Pobrecita! En el país de la Vaca Aurora, La Vaca estudiosa y las vaquitas esas tan lindas que pastaban en verdes prados y "nos dan la leche y el dulce de leche" de los potes de La Serenisima, acá mismo me tengo que encontrar con ésta comiendo plásticos y basura!

Novedades

Si pasaste y te asustaste con la apariencia del blog, que no cunda el pánico!!!...Estaríamos remodelando.
 De todas maneras, si un blog, como los perros, se parece a su dueño, yo podría decir que muchas veces a mi el header se me chanflea para cualquier lado, asi que tan desvariados no andamos. Es un simple reflejo de la realidad!! 
Mercibocú.
Orevuarrr.

Balance 366

Cuando antes veía fotos en Flickr que pertenecían a algún 365, me admiraba de la voluntad de ciertas personas de sostener la aventura de pensar, armar, realizar, editar y publicar una foto cada día durante un año entero. También me pasaba que no comprendía del todo el funcionamiento de un 365; no captaba si era algo en grupo, o personal, o convocado por alguien más...en fín...que nada...
Estoy tratando de recordar como terminé embarcada en este proyecto bisiesto y la verdad que no lo recuerdo. Solo que algo tiene que ver con Luisina, con que este año sea de 366 días y con que creo que era primero de enero el día que me enganché...
Lo empecé con bastante miedo de no poder seguirle el ritmo, y debo admitir que más de una vez perdí la cuenta por atrasarme con las fotos, y se me mezclaron bastante los ordenes!
Lo que  quise lograr con este proyecto fue dejar plasmado en imágenes el transcurso de mi año, siguiendo un poco el hilo de las cuatro estaciones. Y aunque no siempre logré que cada foto fuera realmente sacada cada día del año, si busqué mostrar algo distinto con cada una. A pesar de que los escenarios sean los mismos, creo que es importante buscar otra perspectiva y otra visión al momento de reflejar lo que uno quiere. Antes de pensar una foto trato de mirar las anteriores, y también de mirar el 366 en su conjunto para  no reiterar y que no me aburra, ni a los demás. Ser objetivo con una foto es una de las tareas más difíciles del mundo! Mi prueba de fuego es pensar que algún día, espero no muy lejano, pueda imprimir mi año. Si la foto no es imprimible, entonces no es apta para mi 366.
Para redondear un poco, creo que a esta altura del año ya puedo decir sin dudarlo que el 366 fue uno de los proyectos que más disfruté en los últimos tiempos y que espero poder continuar el 2013. Buenísimo los que se sumaron al grupo y lograron desafiarse, vayan por donde vayan, no importa, intentarlo fue el premio mayor!
Para ver 365+1  click acá

Siesta

Realmente es taaaan necesario que un día que venía así, termine con llamados histéricos  a los celulares de mis hijas a ver cual de las tres me había hurtado el einshelfeis que uso solo dos veces al año, doooos nada más!!!, "y que ya me puse la base carajo, si no me la había puesto no pasaba nada pero ahora parezco un espectropàtronum con anemia, no hay chance de que no me ponga el einshelfeis y no tengo tiempo de sacarme esta blancura, adonde lo metieroooooooooon que estoy llegando retardeeeeee!!!!!??????" 
Y bueno, si, llegué tarde, y mi hijo Nadie me había sacado el einshelfeis, y me lo devolvió días más tarde (Gracias Nadie!) y ahora para que lo quiero si el resto del año soy chacarera y hago la siesta regando y tejiendo a la sombra del damasco, y brotando lentejas y girasoles en mi cocina, y sacando yuyos cuando el sol no pega fuerte y horneando budines y todas esas cosas.......