Viernes por la mañana, con anuncio de lluvias previo, amanecer con chaparrones no nos sorprendió en lo más mínimo. Desayuno, tuppers con almuerzos, meriendas, uniformes, chau, se van todos, me quedo sola y me pongo a ordenar mi espacio de trabajo con mi mate, Serafina, y el ruidito de la lluvia.
Como a las diez me llama él para avisarme que tenía que venir a casa a buscar unas herramientas, y que si necesitaba algo. A los diez minutos me vuelve a llamar para decirme que el vado esta cortado porque el río creció tanto que pasa por arriba de la ruta. No me pude resistir; agarré el sombrerito que uso en vez del paraguas que no tengo, las zapatillas, la cámara con las pilas casi muertas, y partí corriendo por el barro. Por suerte a las dos cuadras me encontré con mi vecina María, su paraguas y sus mil anécdotas de antiguas crecidas de cuando yo no vivía acá.
Aparentemente por los años veinte el río creció tanto que se llevó gente, y hay un monolito en homenaje a los que murieron. En los ochentas otra crecida casi se lleva un auto y sus ocupantes. Este cuento es más cercano y fue presenciado por él y lo escuché una cantidad de veces que justifica ampliamente mi temor a las crecientes. Esa vez el río había crecido mucho más, y un Fairlane terminó bamboleándose en medio del vado, entre una roca gigante y un tronco de árbol, con el conductor y toda su familia en el techo pidiendo ayuda. Justo llegó La Capillense y el chofer, en calzoncillos, ató una soga al paragolpes del colectivo y procedió a salvar a todos. Según el, al padre lo dejó que se salve solo; por boludo. Ponele que estoy un poco de acuerdo. Cuando terminan de salvarse todos, y con ese característico sentido de la oportunidad, llega un patrullero tan rápido que al frenar se incrustó en la banquina. La realidad supera la ficción una vez más.
Por suerte esta vuelta la cosa no fue tan grave y a las horas ya dieron paso y todo volvió a la normalidad.
Y por lo menos las pilas me alcanzaron para cuatro fotos y un video corto.
Los vados...recuerdos para mí de Córdoba.
ResponderEliminarMuy lindas las fotos!!
Te llegó el tuto de las medias? Está entendible?
Beso
Nooo...Adonde me tenía que llegar????
EliminarYo saqué tu mail de tu perfil...no es más ese?
EliminarSi, pero ya me pasó que varias cosas no me llegan. Probá con hotmail, si? Gracias!!!!
EliminarAllá lo mandé! Beso y buen finde
EliminarQue peligro!!
ResponderEliminarEste verano fui a Córdoba ,llovió 1 semana sin parar y los rios estaban con muuucho caudal.
Como siempre es un gusto pasar a visitarte.
Lindas fotos.
Besos
Jor
Si, Cordoba es muy muy linda, pero con los ríos hay que ser muy cuidadoso!!!! Besos!!
Eliminaralallaaaa! muy córdoba!
ResponderEliminarhermosas fotos :)
Muy muy Cordoba!
Eliminarhermosas fotos, bienvenida el agua, verdad?
ResponderEliminarMuy bienvenida, muy esperada, muy agradecidos!!!!
EliminarCórdoba es una provincia hermosa pero agresiva: crecientes violentas, temblores, tormentones, el calorón :).... Mi hermano y su flia viven en Carlos Paz y este fin de semana también tuvieron creciente. El rio Los Chorillos se desmadró maaaallll. Igual ellos viven bien arriba y no paso nada.
ResponderEliminarSi, hubo evacuados, gente escapando por los techos....pero creo que pasa en varias provincias, y los temblores por ahora son más bien anecdoticos!!! besos!
EliminarQue lindas fotos!!!
ResponderEliminarQuiero ver sombrerito que hace de paraguas! =)
En cualqueir momento lo vas a ver! Lo uso siempre, sin esperar que llueva porque si no viviría guardado!!
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